jueves, febrero 8

Delirium tremens

a priori

Ahi esta la inmensidad y la eternidad de lo que yo hablaba. La eternidad pensada e inventada. De mi boca salen las palabras, siempre salen no hay red ni cuchillo ni habitacion insonorizada que haga que no se escuchen.
o al menos no puedan ser percibidas.
Será como tiene que ser. Fue lo que fue.
Me siento encabronada tan solo con mirar y sentir, tan solo con ver que se destruye y se va volando.
Todo lo que no es mío.

Todo lo que no quiero ni deseo.


Que es entonces... el destino. Me lo explicaron muy bien, muy suave, lo entendi a caricias. entendi tambien, verdades. Compliqué. Desenchufé mi cabeza y mezcle verdades con destino.
De la caja surgió lo que paso. Entendí hasta las aristas. Entendí en alemán, en italiano, yo no quería.

Limpié las ventanas y ya no hubo tierra. Pude ver la luz de la luna...


Aquí me encuentro. Luego de la pequeña transición que desencandiló mis pupilas.
Y tal vez no tiene que ver con que después de siete años, vuelvo a estar con mi viejo.



(cuando no sabés si caes o volas. )