Te voy a contar la historia esa de la aproximación y las doce en punto.
Todavía no estan y para agregar emoción se me estan erizando los pelos de la nuca, pero se que inconcientemente o en otra dimensión son tus pelos, porque las doce en punto no llegaron.
Pero estan por llegar, se aproximan sigilosas, sería jocoso que me acariciaran la espalda para anunciarse o hiciesen romper una balsa de vidrio.
La balsa de vidrio va a llegar a las doce en punto. La balsa gorda de vidrio llegará brillante y limpia a las doce en punto, porque yo la conozco. La hora es puntual, el tiempo no falla porque no existe, no entro en terrenos frondosos.
Y qué?-
Eso!. ¿Puede ser posible que haya tenido que ponerlo en un blanco y gran habitáculo solo para darse cuenta de la profundidad de su alma?. El negro en el blanco y reciprocamente también.
Deep & Soul.
Se comprende... . La gente como es y que no importe como es la gente. Que no nos importe a las doce en punto y que ni se te ocurra molestar a la frágil balsa de vidrio.
Porque te mato. Te juro que te arranco de donde estés, de donde MIERDA estés y te mato.
Nah, mentira. Paz por la humanidad, por la gente y por las cosas que se rompen... como la balsa.
Vos... chupá limón and everything seems to be in the right place.
martes, mayo 29
polaroid*
Te voy a contar lo que pasa en simples y armoniosos pedazos de eso.
Resulta que cuando cae la noche algo se convierte y revierte.-
Es entonces el encuentro entre varios mundos disímiles y el gran estruendo pegajoso posterior.
.
Porqué te doy la espalda?
Que porqué te doy la espalda?
La espalda es suave y curva. Tan curva que los pétalos de rosa rodarían libres y perfumados sumidos en toda la suavidad de la espalda.
Una película vieja con besos en la espalda blanca
Recuerdos de película vieja, en blanco y negro y sepia a la vez. Ojos rasgados y lágrimas acariciando espaldas blancas con olor a rosas.
Y los besos? En mi boca.
Los besos van a mi boca.
Esos besos que siempre van a mi boca.
Siempre van a mi boca.
.
miércoles, mayo 23
lIIIIIIIIIIIIIIIII
.
En ese entonces, el cielo fragil y la fina lluvia de gotas al vacío
se le mezclaba el humor con el cielo y era humo.
De pronto, lo inevitable.
Es purpura, la linea, la remera, el dia, la nube gris gris.
Desaparecia y reaparecia a cada rato, me daba gracia esa intermitencia, me llenaba la sonrisa y enjuagaba los ojitos.
Qué piruetas, las medias rayadas, la luna plateada y los reflectores. Si se pudiera, si no me picara la rodilla o no tuviese una migraña horripilante...
Qué-
la lapicera, el cuaderno, la siesta en el banco y ese maldito murmullo escolar.
escapar nada más, que me queda chico de mangas
que no me entra la cabeza por el cuello
Y ahí, claustrofobia.
lunes, mayo 21
!
Maldita sea.
No importa lo que pase.
quiero un vaso roto y un cuchillo muy afilado.
Yo no comía vidrio.
yo lamía cuchillos. Lamo cuchillos, los violo con mi saliva, con mi lengua inescrupulosa.
Me gusta el plateado.
Me gustan los conductores de colectivo sin cabeza, como el de esta tarde.
Me gustan las bufandas, el vientito que se cuela cuando se abre una puerta y me desvela la nuca.
la piel de gallina, la desnudez, el chocolate, el sexo, las fotos, las fiestas, las miradas hablantes, los amigos, la escuela, las manos limpias, los acolchados verdes y las camas con historia.
me gusta la coca cola.
Me gusta chupar cuchillos plateados
y es lo que quiero hacer ahora.
Que nadie se atreva a resistirse.
No importa lo que pase.
quiero un vaso roto y un cuchillo muy afilado.
Yo no comía vidrio.
yo lamía cuchillos. Lamo cuchillos, los violo con mi saliva, con mi lengua inescrupulosa.
Me gusta el plateado.
Me gustan los conductores de colectivo sin cabeza, como el de esta tarde.
Me gustan las bufandas, el vientito que se cuela cuando se abre una puerta y me desvela la nuca.
la piel de gallina, la desnudez, el chocolate, el sexo, las fotos, las fiestas, las miradas hablantes, los amigos, la escuela, las manos limpias, los acolchados verdes y las camas con historia.
me gusta la coca cola.
Me gusta chupar cuchillos plateados
y es lo que quiero hacer ahora.
Que nadie se atreva a resistirse.
viernes, mayo 11
se lo llevan
para siempre .
. Uno bien roto, rayado, circular.
uno que habla por si sólo y se vale de la mugre que flota en un constante.
Lo miro, lo saco, lo retuerzo. Lo huelo, lo mimo, lo oyo.
Huele a sangre y sólo es música matando silencio.
Bien, empecemos con un "dos, pero sólo quiero uno". Se planta la planta y se congela en el lugar. No hay testigos, no hay testigos porque nada pasó y debe ser por eso la falsa modestia, la cortesía de desarraigo de sí mismo.
Qué es eso que no quiere ver? o es que el viento le empapa los ojos y esto desencadena un montón de conjeturas fisiológicas?. Algo de sentido, un poco de cordura, estar centrado en el costado de una hoja roja.
Sí, no!. Sí, no?. La duda bella. Esa que nos deja entrever lo que no quería ser visto. Eso que se escondió bajo la punta. Con cinco hachazos se descorazona una aceituna. Y justo acá se pierde el sentido, el poco de cordura que quedaba y no le queda nada de sí mismo sino el vaso vacío.
Sumido en un sopor de ebriedad se levanta. La nube beige, roja, azul, naranja y ya perdí la cuenta, o todo combinadamente mareante. Una tintineante calesita que se congela de nuevo y cae en que no hay testigos, porque acá nada pasa. ( ...y el hacha para qué...?).
Agua, quiereaguamucha. Se imagina los senos de una mujer como dos grandes lágrimas de elefante, un llanto vomitivo, un llanto que le nace del nacer de lo imaginado. -Póbre elefante... .
No: No me quedo con eso, no, yo estaba mirando, no?, pero no era testigo porque no me vió, sólo lloraba cursi, desconsoladamente. Volvemos..
El hacha para qué?. La hoja teñida de líquido humor lo explica y todo partido a la mitad, el mueble, la silla, el vaso, la botella, ese viejo libro y hasta la aceituna. Era doble, no veía doble, lo era realmente. Esquizoide?.
Un llanto repetido, famélico, hipante que cesa con un cuerpo sobre el piso, la hoja en blanco, un cuerpo sin alma desde la primera botella, un cuerpo teñido, un hacha en el piso.
Lo.ví.
Lo saco porque se me enerva la espina.
.
. Uno bien roto, rayado, circular.
uno que habla por si sólo y se vale de la mugre que flota en un constante.
Lo miro, lo saco, lo retuerzo. Lo huelo, lo mimo, lo oyo.
Huele a sangre y sólo es música matando silencio.
Bien, empecemos con un "dos, pero sólo quiero uno". Se planta la planta y se congela en el lugar. No hay testigos, no hay testigos porque nada pasó y debe ser por eso la falsa modestia, la cortesía de desarraigo de sí mismo.
Qué es eso que no quiere ver? o es que el viento le empapa los ojos y esto desencadena un montón de conjeturas fisiológicas?. Algo de sentido, un poco de cordura, estar centrado en el costado de una hoja roja.
Sí, no!. Sí, no?. La duda bella. Esa que nos deja entrever lo que no quería ser visto. Eso que se escondió bajo la punta. Con cinco hachazos se descorazona una aceituna. Y justo acá se pierde el sentido, el poco de cordura que quedaba y no le queda nada de sí mismo sino el vaso vacío.
Sumido en un sopor de ebriedad se levanta. La nube beige, roja, azul, naranja y ya perdí la cuenta, o todo combinadamente mareante. Una tintineante calesita que se congela de nuevo y cae en que no hay testigos, porque acá nada pasa. ( ...y el hacha para qué...?).
Agua, quiereaguamucha. Se imagina los senos de una mujer como dos grandes lágrimas de elefante, un llanto vomitivo, un llanto que le nace del nacer de lo imaginado. -Póbre elefante... .
No: No me quedo con eso, no, yo estaba mirando, no?, pero no era testigo porque no me vió, sólo lloraba cursi, desconsoladamente. Volvemos..
El hacha para qué?. La hoja teñida de líquido humor lo explica y todo partido a la mitad, el mueble, la silla, el vaso, la botella, ese viejo libro y hasta la aceituna. Era doble, no veía doble, lo era realmente. Esquizoide?.
Un llanto repetido, famélico, hipante que cesa con un cuerpo sobre el piso, la hoja en blanco, un cuerpo sin alma desde la primera botella, un cuerpo teñido, un hacha en el piso.
Lo.ví.
Lo saco porque se me enerva la espina.
.
algunos moños rotos .
.
Cuando brota. Brotan los brotes verdesvioletas.
Brota el frío desde mí hacia afuera y mi centro enfría la ciudad
haciendola más bonita, más nostalgica.
Magia es. Magia de mi ser que pareciera iluminar la luz
iluminar tu cara tan sólo con dos palabras.
dos palabras mágicas y cortas.
Es simple. El círculo sin aristas, sin ninguna ciencia
...elcírculovicioso... que no me desnuda
porque yo soy frío y le traigo viento al círculo liviano
Soplé.
Soplé lejos y me miraste. Y también vi edificios teñidos
y ojos que no sabían donde mirar
vi la aguja y la saqué.
Porque Buenos Aires es un mal de amores.
Porque lucho para que lo siga siendo.
amén.
Cuando brota. Brotan los brotes verdesvioletas.
Brota el frío desde mí hacia afuera y mi centro enfría la ciudad
haciendola más bonita, más nostalgica.
Magia es. Magia de mi ser que pareciera iluminar la luz
iluminar tu cara tan sólo con dos palabras.
dos palabras mágicas y cortas.
Es simple. El círculo sin aristas, sin ninguna ciencia
...elcírculovicioso... que no me desnuda
porque yo soy frío y le traigo viento al círculo liviano
Soplé.
Soplé lejos y me miraste. Y también vi edificios teñidos
y ojos que no sabían donde mirar
vi la aguja y la saqué.
Porque Buenos Aires es un mal de amores.
Porque lucho para que lo siga siendo.
amén.
lunes, mayo 7
hechizo .
.
El llanto enerva mis nervios.
mis nervios me hierven la sangre
la sangre fluye al cerebro enardecido
el cerebro arde y mis quemantes ojos sumidos en éter
la embriaguez de mi boca me causa estupor
Sometidos al tumulto se deshacen en el llanto mismo
ese que me enerva, me desorienta y excita
Y mi alma fragmentada en tristes pedazos purpúreos.
El llanto enerva mis nervios.
mis nervios me hierven la sangre
la sangre fluye al cerebro enardecido
el cerebro arde y mis quemantes ojos sumidos en éter
la embriaguez de mi boca me causa estupor
Sometidos al tumulto se deshacen en el llanto mismo
ese que me enerva, me desorienta y excita
Y mi alma fragmentada en tristes pedazos purpúreos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)